miércoles, 12 de marzo de 2008

Bendito periférico




El reloj marca las cuatro de la tarde. Llego a casa tras un día agotador, del cual restan en mi memoria pequeñas motas de semiótica compleja que no logro o no quiero comprender. Una vez cerrada la puerta de mi casa y oído el inherente chirriar de su madera, lanzo mis cosas contra la cama, me dirijo al comedor y me tiro en plancha contra el sofá. El primer estímulo de mi cuerpo cobra sentido en la vista, que se centra inevitablemente en el mando a distancia de mi TV Sony 30" de tubo. Sé lo que me ofrecerá en esa franja horaria, pero aun así la enciendo decidido, oteando con la determinación de aquel que fracasa buscando vaciar su mente delante de ese tótem cotidiano que es la TV. A los diez segundos caigo vilmente en la práctica común, recurrente y obsesiva, a la par que inútil, que es el zapping.

Apago la televisión e injiero alguna cosa. Estoy cansado, me duelen las articulaciones y la cabeza me estallará de un momento a otro. Acto seguido decido ir a la cama y caigo en un placentero sueño que me ahuyenta de la realidad durante unos efímeros tres cuartos de hora. Me levanto y todavía tengo sueño pero, como siempre, hay cosas que hacer. Empiezo a repasar mis apuntes y al poco rato percibo que mi dolor de cabeza va in crescendo, que el respaldo de mi silla asfixia continuamente mi espalda y que los dedos de mis manos se quejan de la presión que ejercen sobre el bolígrafo BIC azul que siempre me acompaña. Por unos momentos lo dejo todo, me pongo las manos en la frente y alzo la cabeza. En el fondo de la habitación parece brillar una luz negra (qué extraño), que me invita lascivamente a dejar mis cosas para desmadrarme y desconectar, otra vez, de la realidad. Desangeladamente, me levanto y me dirijo hasta el fondo de la habitación, donde resuelvo que la luz nace del reflejo que mi modelo de Gibson Les Paul proyecta sobre las paredes de mi habitación mientras aguarda acomodada a que alguien la coja y la toque como se merece.

Dubitativo, la miro fijamente y al final acepto el desafío. Le quito la funda, me la cuelgo, enciendo mi Xbox 360, introduzco mi copia del Guitar Hero III y se desata la locura. Ahora ya no resuenan nombres de autores como Harold D. Lasswell o Walter Benjamin en mi mente, todo lo contrario. Mi alma cae presa de los acordes que "My Name is Jonas" de los Weezer me obliga a controlar, entrando automáticamente en un estado de explosión, de salvajería incontrolable que, a buen seguro, mis vecinos agradecerán.

Ahora floto. Ya no me duele la cabeza, mi espalda describe sinuosas curvas de rock y mis dedos vuelan para alcanzar todos los botones de traste. El dolor ha desaparecido.

4 comentarios:

El Miope Muñoz dijo...

Hombre, el Guitar Hero es la extensión de los que rockeábamos en el aire (aunque las air guitars también sean fenómeno) y da sentido, como no, como toda canción de rock al asco vital. Eso MOLA.

Y respecto al Stranglehold: resta mucho tus expectativas, tiene un par de episodios gloriosos (el primero y el quinto) pero la sensación general es de completa decepción, entretenimiento pero con muchas pegas. Y lo creas o no, Chow Yun Fat no parece Tequila, hay unas subtramas que le quitan toda la personalidad que lució en Hard-Boiled y este Woo está muy desigual. Además los mexican standoffs no me gustan ASÍ, aunque agradezco el intento. Y la ausencia de Tony Leung: pocas serán las lágrimas que corran, porque desde luego así no se puede sostener una historia de honor, que luego no lo es tanto, y es más rutinario.

Gas Snake dijo...

Ave, Guitar Hero... Necesito un par de semanas de Guitar Hero 3 para volver a ser el que fui con las dos primeras entregas.

Y hablando de rock, viva "Tenacious D"

http://es.youtube.com/watch?v=80DtQD5BQ_A

(sí, estoy yutubero)

Ryu_gon dijo...

sí, gran banda. Además, en el Guitar Hero III viene una de sus mejores canciones, "The metal". Sencillamente genial.

sesi dijo...

para un rasgueador frustrado como el menda el guitar es un sueño hecho realidad XD

hace poco no tenia ni idea de ke la voz de Tenacious D fuera la de Jack Black... ke grande (en todos los sentidos), no solo por el humor rockero al estilo Fuck Her Gently, sino por el sentido y humilde homenaje ke se esconde tras modestas parodias musicales con aroma a Robert Johnson como Tribute... como co** puede emocionarme este tema?! XDD

PD: alguien se apunta a un Cliffs of Dover en expert? Veo una mano? Dos? ...alguien da más? XD