sábado, 5 de abril de 2008

Apúntenlo!

Caballeros, magos, brujas, hechiceros, monstruos, espíritus, demonios, invocaciones, soldados futuristas, naves espaciales y formas de vida interestelares son algunos de los componentes que conforman el enfoque clásico en el que se inscribe el rpg, tanto oriental como occidental. Nunca nos quejamos de ello porque siempre esperamos ansiosos un nuevo componente que eleve la recurrente experiencia de juego a otro nivel. Porque el rol, desde mi perspectiva, es el género de los matices, de las sensaciones extremas y de los sentimientos. Una fuente que da vida a creaciones de la magnitud de algunas obras literarias y que nos sumerge en un estadio de juego sin igual. La realidad, pero, es que tras las vastas posibilidades que ofrece el concepto de rpg se esconde una temática y una reiteración de tópicos que restan muchas credenciales a la mayoría de juegos que copan esta vía de juego.

Alpha Protocol, desarrollado por Obsidian Games y abanderado por Sega, parece dispuesto a insuflar una nueva perspectiva contextualizadora que, trabajando sobre la misma base del género, nos aleje de los viejos estereotipos impuestos por las compañías más famosas y demandados por los jugadores más conservadores. El título de Obsidian, que saldrá en 2009 para 360, PS3 y Pc, beberá del espionaje cinematográfico más puro para meternos, por decirlo de alguna manera, en el cuerpo de un Jason Bourne virtual que recogerá el sistema de combate de Mass Effect y, ojo, una representación facial de los personajes parecida a la que ya vimos en la titánica obra de Bioware. Y además, parece que estará ambientado en la época actual

Por lo visto, alguien parece decidido a mostrar que hay formas y formas de hacer rol. Habrá que seguir a este juego minuciosamente.

3 comentarios:

El Miope Muñoz dijo...

Estoy muy de acuerdo en eso de que el rol es el género de los sentimientos, nunca mejor definido por todo lo visto/leído (que todavía no suficientemente jugado)! No lo veo equiparable a una gran obra literaria por un simple motivo: es un género y cualquier gran obra debe trascenderlo, superarlo y/o reformularlo. Es una norma estricta en toda obra a considerar. Nunca pienso en Hamlet como en un "gran ejemplo de tragedia" ni en Psycho como en un "gran film dentro de su género, el horror". A mí me parece que juegazos como N+, Portal (ambos recomendados y vindicados por la Xtreme) y otros (Super Mario Bros) son grandes obras por sí solas.

La oportunidad de hacer del juego una gran obra literaria estuvo en manos de la aventura gráfica, género que da muchas posibilidades respecto a la ficción y que ahora mismo se integra o bien en el rpg o bien en formatos portátiles. Juegos como Monkey Island o Grim Fandango, de LucasArts, o el más reciente Fahrenheit tienen mucho de literario en la exploración.

El Miope Muñoz dijo...

Y por no hablar de Hotel Dusk cuyo punto de partida haría sonreir al Stephen King más metaficticio y pilluelo, el de Bag Of Bones o la reciente Lisey's Story.

Ryu_gon dijo...

Cuando hablaba de comparar el género con una obra literaria, me refería obviamente a títulos en concreto. Porque si una cosa no se puede negar es que el rol actúa en un marco de acción paralelo al de la narrativa. Normalmente, cuenta unos hechos que se suceden en un lugar determinadom y que están protagonizados por unos personajes cuyo retrato suele ser completo tanto a nivel físico como psíquico.

Y también es cierto que la aventura gráfica bebe de la narrativa, pero su carácter interactivo y de presa de decisiones la alejan de la lectura lineal. Aunque, claro, estamos comparando novelas con videojuegos y eso también se tiene que tener en cuenta.

Saludos!