martes, 23 de septiembre de 2008
Tan cool como su nombre indica
Siempre me he considerado fan de los juegos protagonizados por Cool Spot, uno de los personajes más destacados del ocio electrónico de los 90 aunque su paso por el mundo del píxel no haya dejado huella como sí lo han hecho otros representatnes del género con más popularidad y juegos. Por aquel entonces, los iconos de las consolas, generalmente relativos al prácticamente extinto género de las plataformas, solían ser mascotas inspiradas en animales, como Bubsy, Donkey Kong o Sonic, o personajes con una gran fuerza expresiva y de diseños realmente admirables. Ahí están los Mario, Mega man, Prince of Persia o el simpático Alex Kidd.
Cool Spot no era precisamente así. Su origen emana propiamente del product placement, y no es otro que el símbolo que la marca 7even Up de bebidas utilizó como reclamo publicitario al inicio de los 90. De entrada, ver el diseño del personaje, impactaba. Una simple esfera roja (un punto?) con gafas de sol y aire festivo y lúdico. Algunos lo han criticado por sus formas simples, otros, como es el caso, lo alabamos por su descaro y convergencia a la hora de adaptarse a un formato de juego también simple (que no por ello fácil y carente de grandes dosis de diversión) sin pertenecer a esa "fábrica de los sueños" que es la industria del videojuego.
El bichejo se movió por formatos tales como Game Boy, Game Gear, Mega Drive, SNES e incluso Amiga, protagonizando alocados saltos en ricos entornos repletos de color y de vida. Sus animaciones, representadas a partir de una supuesta elasticidad en las extremidades, eran deliciosas, dando lugar a movimientos muy suaves y dinámicos con los que dirigir el personaje. Así, Cool Spot no cogió el cielo con los dientes, pero sí se convirtió en una incombustible muestra de diversión que ya irradiaba el mismo personaje y su origen puramente consumista. Precisamente, lo que sorprende es que de la idea pudieran surgir juegos tan notables en todos los aspectos, cosa que no vemos, por ejemplo, en la mayoría de adaptaciones cinematográficas a videojuegos.
El tiempo pasó y los 32 y 64 bits, ya en aras de entrar en el nuevo milenio, enterraron el viejo logo de Spot, cuyo sentido cool se había perdido en un contexto donde la grandilocuencia de formas y longevidad de juegos ha ido a más, y lo seguirá haciendo.
No por ello hay que olvidar que un día conducimos a un simpático logo de bebida por los circuitos de nuestras convencionalmente extintas consolas.
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4 comentarios:
Cool Spot fue uno de los grandes de la Mega Drive, un juego muy molón que siempre ha tenido un hueco en mi corazoncito.
Además, no hay nada mejor para acompañar un Whisky que un buen Seven Up.
Ahí la ha clavado. Personalmente, también me quedo con su papel en Mega Drive.
Saludos!
Tocuhé. Lo único que recuerdo de esté personajillo es su aparición en Mega Drive. No sabía que también correteó en otras plataformas.
Y, personalmente, prefiero el Sprite. xDD
Mmmm... Sprite sabe a pastilla, será mi paladal ^^'
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